, Acción Sindical, USO en la calle

El 22 de octubre, a las 12:00, USO y otros ocho sindicatos independientes han convocado una manifestación en Madrid por los salarios y la recuperación del poder adquisitivo

Este sábado, cientos de sindicalistas de USO llegados de toda España acudirán a la manifestación convocada en Madrid para exigir la subida de los salarios y la recuperación del poder adquisitivo. La manifestación partirá de la Puerta del Sol a las 12:00 por la calle Carretas, seguirá por la calle Atocha y terminará en la plaza del Museo Reina Sofía, en torno a las 14:00.

Desde muchas de las capitales autonómicas partirán autobuses, aunque otros muchos llegarán en transporte público o en coches particulares.

USO es uno de los nueve convocantes de esta manifestación. Nueve sindicatos independientes, con representatividad en todos los sectores del ámbito público y privado, que denuncian que todos los trabajadores perdieron poder adquisitivo en 2021 y siguen perdiéndolo, cada vez, en 2022.

“El IPC está desbocado. Mientras, la subida salarial, para quien la tiene, es del 2,6 % de media por convenio. Para los empleados públicos será del 3,5 %. Y a ver qué pasa finalmente con los pensionistas. Tras este modelo de negociación colectiva ineficaz se encuentra el diálogo social institucionalizado y opaco, contra cuyo modelo también nos manifestamos el sindicalismo independiente. Entendemos que otro sindicalismo es posible”, afirma Joaquín Pérez, secretario general de USO.

Una reforma laboral a medias

Fruto también del diálogo social encorsetado “ha sido la reforma laboral a medias, que no ha corregido los problemas centrales del mercado laboral”, remarca Pérez.

El secretario general de USO recuerda que “la temporalidad sigue siendo muy alta. Una cosa es llamar al contrato ‘indefinido’ y otra, que realmente lo sea. En septiembre de 2022, los contratos duraron un 20 % menos que en 2021, antes de la entrada en vigor de la reforma. Con los datos a fin de mes, vemos que la duración media de un contrato este año es de 49 días, mientras que en 2021 era de 61 días. Además, no se ha frenado el efecto lunes-viernes de la contratación. Simplemente, ahora se ha pervertido el fijo-discontinuo en lugar de ponerle otro nombre. Un tercio de los contratos dura menos de una semana”.