El pasado 16 de junio se conmemoró el Día Internacional de los Trabajadores del Hogar, fecha que señala la adopción histórica del Convenio 189 de la OIT en 2011. La Confederación Sindical Internacional destacó que en los últimos años se ha producido un cambio tanto político como moral entre un número cada vez mayor de líderes políticos, brindando derechos y protección para los millones de trabajadores y trabajadoras del hogar, poniendo fin a la desprotección y a las condiciones de explotación en las que trabajaban por un empleo ahora protegido por la legislación laboral.
A pesar del apoyo por parte de los gobiernos de los diversos países al convenio 189 de la OIT, en España no ha habido ningún avance significativo y el Gobierno español no ha ratificado aún este convenio internacional que establece normas laborales para los trabajadores domésticos. Desde USO exigimos al Gobierno que ratifique cuanto antes este convenio que recoge derechos tales como salario mínimo, la protección social, la regulación del tiempo de trabajo y el derecho de contar con un día libre a la semana.
Según la Organización Internacional del Trabajo, hay alrededor de 53 millones de trabajadores domésticos en el mundo, de los cuales el 83%son mujeres. Sin condiciones contractuales claras, sin escalas salariales reglamentadas y sin estatus oficial, los trabajadores domésticos se encuentran entre los grupos más vulnerables del mundo.
El convenio 189 de la OIT surgió como resultado de un imparable movimiento de los trabajadores y trabajadoras del hogar y, tras una exitosa campaña, ha conseguido obtener 21 ratificaciones y un gran número de reformas de la legislación laboral. Sin embargo, aún hay muchos países que no lo han adoptado, como es el caso de España.
Para celebrar el cuarto aniversario de la adopción del Convenio sobre los trabajadores domésticos, el departamento WorkQuality de la OIT ha puesto en marcha una campaña de sensibilización dirigida a su personal funcionario acerca de sus responsabilidades como empleadores de trabajadores domésticos, convencidos de que los derechos comienzan en casa y que se deberían establecer relaciones de respeto con aquellos y aquellas que cuidan nuestros hogares y familias.
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