Igualdad

La Plataforma por Permisos Iguales e Intransferibles de Nacimiento y Adopción (PPiiNA) ha mantenido un encuentro con diputados de “prácticamente todos los Grupos Parlamentarios” del Congreso para abordar la necesidad de llevar a cabo una reforma legislativa que establezca que los permisos por nacimiento y/o adopción deben ser, para padres y madres, intransferibles, de igual duración, con la misma parte obligatoria y pagados al 100%.

Este encuentro ha servido para lograr el compromiso de los Grupos Parlamentarios de reunirse en dos semanas para impulsar una ley que establezca “un único permiso por nacimiento y adopción’”, dirigido a “cualquier trabajador que haya cotizado” y que sea “personal, intransferible y remunerado”.

Los representantes de la PPiiNA han instado a los distintos grupos a que la primera medida que impulse el nuevo Parlamento sea este permiso de 16 semanas equiparado tanto para padres como para madres, y han insistido en que la propuesta tiene “múltiples ventajas” tanto para la conciliación de las familias como para las empresas, que pueden beneficiarse en las cotizaciones.

En la actualidad, los padres disponen de dos semanas y las madres de 16, y de éstas pueden transferir 10 a sus parejas, opción que sólo se lleva a cabo en el 1,5% de los hombres que acaban de ser padres.

Conciliación y corresponsabilidad, objetivo de la sociedad
Desde USO recibimos satisfactoriamente este compromiso de los Grupos Parlamentarios con la equiparación de los permisos por nacimiento y adopción y esperamos que, a diferencia de otras ocasiones, esta medida para avanzar en igualdad tenga acompañamiento presupuestario y no quede olvidada en un cajón.

La conciliación y la plena corresponsabilidad deben ser nuestro objetivo como sociedad, y son cuestiones que no deben quedar relegadas como prioridades últimas, como lleva ocurriendo con la ampliación del permiso de paternidad, que lleva posponiéndose desde hace cuatro años. Por ello, desde USO esperamos que ese compromiso político se transforme en una realidad que permita a hombres y mujeres participar de forma igualitaria en la vida familiar y laboral.