Tras seis años de ininterrumpida destrucción de empleo, de pérdida de derechos laborales y sociales que nos afectan, desde USO queremos denunciar este 8 de Marzo que las consecuencias de la crisis se están ensañando con mayor crudeza en las mujeres a las que afecta, directamente, con reducciones salariales, pérdida o precarización de sus puestos de trabajo, e indirectamente, a través de los recortes presupuestarios en los servicios públicos y las ayudas sociales.
Desde la USO insistimos en que uno de los principales indicadores de calidad de vida democrática es el acceso de las mujeres en igualdad de condiciones que los hombres a todos los ámbitos de la vida. El derecho al trabajo digno es una condición esencial para una igualdad de derechos efectiva, para la independencia económica y la realización profesional de las personas. En España con una tasa de desempleo del 26’03%, con un 27% de las mujeres desempleadas, debemos combatir estas cifras e instar al Gobierno a que haga políticas efectivas y reales de empleo, políticas que traten por igual a hombres y mujeres. En definitiva, políticas que incluyan la dimensión de la igualdad de género a la hora de hacer frente a esta crisis y desarrollar soluciones para superarla.
Al iniciarse la crisis económica la destrucción de empleo fue mayor para los hombres que para las mujeres, pero a lo largo de estos años la tendencia se ha invertido. En la actualidad, las mujeres se ven más afectadas, no sólo por el desempleo sino también por la mayor y cada vez más creciente presencia en trabajos precarios y a tiempo parcial, mayor riesgo de despido, salarios más bajos y menor cobertura de los sistemas de protección social. A todo esto, hay que añadir la persistente brecha salarial que en España se sitúa ya en un 22,5%. Desde USO alertamos que también se verán más afectadas a largo plazo por el desempleo, la precariedad laboral, la salida del mercado laboral por la maternidad o por el cuidado de familiares dependientes, el que se vean obligadas a ejercer un trabajo no remunerado o informal a menudo en casa o cuidando personas dependientes o trabajando en la economía sumergida. Esta situación va a conllevar una condena a la exclusión social para miles de mujeres que no van a poder acceder en un futuro por falta de cotización a una pensión digna, o simplemente no van a poder disfrutar de ninguna pensión o prestación social.
Los PGE de 2014 recortan un 36,5% la asignación de Servicios Sociales, reducción que hay que sumar a la persistente disminución de la inversión en partidas como; Ayuda a la Dependencia, conciliación familiar, políticas de igualdad y de prevención de la violencia de género, en ayudas a guarderías públicas…
El sistemático recorte en políticas sociales y asistenciales por parte del gobierno, junto con la situación económica actual, han provocado la salida del mercado laboral de muchas mujeres se vean obligadas a asumir el tradicional papel de cuidadoras, ya que, también, la corresponsabilidad y las políticas de conciliación han sido una de las víctimas de esta crisis y de las reformas sociolaborales. Hemos de seguir reivindicando en el ámbito de las empresas que las medidas y planes de igualdad de oportunidades se negocien y apliquen no consintiendo que la crisis sea la excusa para incumplir unas políticas que habían conseguido paliar las desigualdades entre hombres y mujeres tantos años instauradas como “normales”.
USO seguirá luchando para que las mujeres no sean las principales víctimas de esta crisis, exigiendo políticas de creación de empleo digno, la inversión en políticas sociales e iniciativas legislativas a favor de la igualdad efectiva a través de nuestra principal fuerza: la representación sindical en los centros de trabajo. Por ello, es crucial la participación de las mujeres en las candidaturas de la USO para que luchen desde dentro por los derechos de todas y todos, trabajando por la eliminación de las desigualdades de las que son víctimas.
Hoy más que nunca, nuestra unión es nuestra fuerza ¡PARTICIPA CON LA USO EN LAS ELECCIONES SINDICALES!
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