Analizamos el nuevo sistema de tarjetas monedero para alimentación y productos de primera necesidad destinado a familias vulnerables
El Consejo de Ministros ha aprobado la concesión de una subvención directa a Cruz Roja Española para poner en marcha un programa para ofrecer productos de alimentación y otros productos básicos de primera necesidad a familias con menores a su cargo en condiciones extremas de vulnerabilidad. Se trata de una medida excepcional que se da por razones humanitarias.
¿Cómo funcionarán las tarjetas monedero?
Se trata de tarjetas o vales canjeables con las que las familias en situación de extrema vulnerabilidad con personas menores de edad a su cargo podrán adquirir diferentes productos en establecimientos que se adhieran a este programa.
Con estas tarjetas se busca combatir a la pobreza infantil y es complementaria a otras ayudas a las que puedan acceder estas familias. Se trata de una medida que transforma la operación de los bancos de alimentos: en lugar de entregar una bolsa con despensa, se entregarán las tarjetas para que las familias elijan los productos que necesitan.
¿Quiénes son los beneficiarios de este programa?
Las familias que se encuentren en condiciones de privación material severa con una o más personas menores de edad a su cargo.
¿Cuál es el importe que recibirán?
Dependerá del número de personas que integren la unidad familiar. Así:
- Dos miembros de la unidad familiar (una persona adulta y una persona menor de edad): 130 euros al mes.
- Tres miembros de la unidad familiar: 160 euros al mes.
- Cuatro miembros de la unidad familiar: 190 euros al mes.
- Cinco o más miembros de la unidad familiar: 220 euros al mes.
¿Cuándo empezará a operar este programa?
Comenzará a funcionar en abril y hasta el 31 de diciembre de 2024 y será gestionado por Cruz Roja Española.
¿El programa desaparece en 2025?
No. A partir del 1 de enero de 2025, las comunidades autónomas lo ejecutarán. Desde USO consideramos que esta medida es positiva y busca no dejar a las familias con personas menores de edad a su cargo y en situación de extrema vulnerabilidad sin un apoyo vital para su subsistencia. Esta medida dignifica a las familias que se benefician del programa ya que respeta su autonomía en la elección de productos de primera necesidad para sus integrantes. Esperamos que las comunidades trabajen en la planificación y garantía de este programa social y se le dé continuidad en 2025.
Por otra parte, consideramos que junto con estas medidas que atienden a una necesidad imperiosa y urgente, se deben establecer rutas claras y objetivas que terminen con el asistencialismo y conduzcan a políticas integrales que atiendan las carencias estructurales que empobrecen a las familias en España y que han ocasionado que la pobreza infantil llegue a los niveles indignantes en España. No es posible que tengamos la tasa más alta de Europa con un 27,8 %, como denunciado UNICEF.
Mientras no tengamos un salario y condiciones de trabajo dignas, estabilidad en el empleo y políticas redistributivas con perspectiva de derechos humanos y de género acordes a la realidad española, la pobreza continuará con su avance.
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