USO urge la aprobación y aplicación de la nueva jornada laboral, ya que está ralentizando y condicionando la negociación colectiva

USO reclama una rápida aprobación y aplicación de la nueva jornada laboral. Una medida que “desde USO valoramos, ya que es una de las reivindicaciones históricas de nuestra organización. No solo 38,5 o 37,5, sino llegar a las 35 horas. Un objetivo irrenunciable de nuestro sindicato, teniendo clara la necesidad de mejorar de forma general la organización y el tiempo de trabajo”, demanda Joaquín Pérez, secretario general de USO.

El Consejo Confederal de USO urge la medida y “que no se dilate en períodos de transición eternos, ya que esta situación está perjudicando gravemente a la negociación colectiva, ralentizando y condicionando sus procesos; especialmente en los convenios sectoriales, que permanecen a la espera de conocer la aprobación de la reducción de la jornada y el procedimiento para su posterior implementación”.

Un beneficio para los más precarios

USO mantiene que la reducción de la jornada debe beneficiar a las personas trabajadoras más precarizadas; especialmente, a quienes tienen contratos a tiempo parcial. Estas verán incrementado su salario trabajando el mismo tiempo o su contrato se convertirá en tiempo completo si supera la jornada anual establecida en el Estatuto de los Trabajadores.

El cambio legislativo debe ser, asimismo, una oportunidad para revisar y regular el registro horario. Esta medida ha sido un fracaso en su aplicación. Entre otras razones, por su ambigua regulación, que no ha corregido el fraude y el abuso en la jornada laboral por parte de algunas empresas.

Y no solo el registro horario. En USO consideramos que también es necesario endurecer las infracciones vinculadas a los incumplimientos, fraude y abusos relacionados con la jornada laboral en su conjunto. Además de esto, nuestro sindicato sigue exigiendo el refuerzo, en miembros y en ampliación de sus competencias, de la Inspección de Trabajo para que el seguimiento, vigilancia y control del cumplimiento de la nueva regulación se pueda realizar.

La jornada laboral: también es necesaria su redistribución

Además de la reducción, es necesario mejorar la regulación de la redistribución de la jornada. De cara a la conciliación de la vida personal, en muchos casos el problema no se encuentra en la duración de la jornada, sino en su distribución. Esto ocurre, especialmente, en las jornadas partidas.

Por eso, USO añade la necesidad de una modificación de la normativa sobre redistribución de horarios, que favorezca la conciliación del trabajo, con la vida personal y familiar, y la excepcionalidad de las jornadas partidas. Vemos especialmente positiva la contemplación de márgenes de horario flexible, tanto al comienzo como al final de la jornada diaria de trabajo, con solo 5 horas diarias de horario rígido.

El necesario cambio productivo

La reducción de la jornada por decreto no será efectiva mientras no se adopten medidas dirigidas a cambiar el modelo productivo. “No podemos seguir apostando por un modelo estacional basado en el turismo. Desde USO, seguimos reivindicando planes de mejora de la productividad, políticas y reformas del sistema productivo que nos lleven a la creación de empleo estable y de valor añadido. También denunciamos la oportunidad que se está perdiendo de aprovechar los fondos de la UE para esta finalidad”, recuerda Joaquín Pérez.

Desde USO, reclamamos las modificaciones legislativas necesarias que permitan generar empleo de calidad, frenar el incremento de la precariedad y recuperar la pérdida de poder adquisitivo generada en los últimos años. El fin es poner el foco en la creación de empleo indefinido “real”.