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Hasta agosto, más de 30.000 accidentes de tráfico se produjeron durante la jornada o al ir y volver del trabajo. USO defiende que se implanten Planes de Seguridad Vial de Empresa para proteger la seguridad de las plantillas

Según la estadística de siniestralidad laboral, de enero a agosto se produjeron un total de 30.409 accidentes de tráfico en los desplazamientos durante la jornada y al ir o volver del trabajo. De esta cifra total, los accidentes in itinere duplican a los sufridos durante la jornada, aunque los que han tenido consecuencias mortales son similares e igual de inadmisibles.

Por ello, desde USO creemos que el ámbito donde se deberían de redoblar los esfuerzos para conseguir rebajar la siniestralidad laboral es en los desplazamientos relacionados con la actividad laboral, siendo el teletrabajo o las reuniones telemáticas algunas soluciones para ello.

Una de las líneas de acción estratégica en la política de seguridad vial es la mejora en los desplazamientos relacionados con el trabajo. Los desplazamientos por motivos laborales, ya sean durante la jornada de trabajo o al desplazarse entre el domicilio y su puesto laboral son un foco de riesgo en cuanto que contribuyen a aumentar la siniestralidad vial. Por ello, en las empresas deben de implantarse Planes de Seguridad Vial, sin importar tamaño o actividad, con el objetivo de proteger la seguridad de sus plantillas.

Principales factores de riesgo para los accidentes de tráfico

Los factores de riesgo que pueden dar lugar a accidentes de tráfico son:

  • El factor humano: existen elementos que influyen como el alcohol, las drogas, los psicofármacos, la fatiga, la falta de atención o el estrés.
  • El factor vehículo, elemento que se utiliza tanto para el desplazamiento hasta el centro de trabajo como herramienta profesional. Entre los riesgos asociados al mismo se incluyen el estado de los neumáticos y frenos; fijación de la carga a transportar; disipación de gases; parachoques; estructuras absorbentes; cinturones de seguridad; cascos; airbags; depósitos antirotura y antiderrame, o cabinas reforzadas.
  • El factor vía. Entendido como el escenario donde se realiza el tráfico.
  • El factor empresa. La organización de la actividad empresarial debe incluir, entre otros, la planificación de las rutas, los niveles de productividad exigidos, las políticas de remuneración, la gestión de las comunicaciones y el mantenimiento preventivo de los vehículos.

Fases del Plan de Seguridad Vial de Empresa

Como paso previo a la implantación de un Plan de Seguridad Vial de Empresa se debe implicar en la participación a todos los actores. Es fundamental que toda la plantilla se sienta parte del plan para evitar la sensación de imposición.

Las siguientes fases de un Plan de Seguridad Vial de Empresa se pueden resumir en:

  • Diagnóstico: analizando la movilidad, los accidentes, las condiciones reales de conducción y la gestión de los desplazamientos.
  • Evaluación de riesgos: asignando el nivel de exposición del riesgo para diferenciar los colectivos prioritarios en los que implantar las medidas preventivas.
  • Elaboración del Plan: definiendo los objetivos a alcanzar conforme a las acciones programadas.
  • Implantación del Plan: comunicando la misma a la plantilla advirtiendo de la adecuación de instalaciones y equipos, en su caso, y estableciendo los procesos teniendo en cuenta la adaptación del mismo a los cambios.
  • Seguimiento y evaluación: a través de indicadores para poder concretar las acciones correctivas o de mejora.

Recomendaciones para prevenir accidentes de tráfico con lluvia

Con la llegada de la lluvia, el riesgo de sufrir accidentes de tráfico aumenta significativamente. Por ello, USO destaca una serie de recomendaciones que sirven para todos los colectivos que desarrollan sus funciones conduciendo, así como para las personas que utilizan sus vehículos para ir trabajar:

  • Comprobar antes de salir el estado de los elementos del vehículo como luces, frenos, neumáticos, amortiguación y el sistema de climatización para evitar los empañamientos.
  • Extremar la precaución ante las primeras gotas de lluvia puesto que la mezcla del agua el polvo y la suciedad provoca que la carretera sea una superficie sumamente deslizante.
  • Adecuar la velocidad a la vía por donde se circula utilizando el freno con suavidad.
  • Tener en cuenta las líneas blancas de la carretera, pueden ser el origen del accidente por frenar sobre ellas.
  • Para evitar el aquaplanning, no se debe frenar sino reducir la velocidad y controlar con firmeza la dirección hasta que no sintamos que las ruedas vuelven a tener adherencia suficiente.
  • La lluvia es un estresor. Puede controlarse saliendo con una mayor anticipación y descansando, más de lo recomendado para situaciones normales, para poder recuperarnos de la mayor fatiga que produce.

Especialmente en otoño, es habitual también que el trabajo en exteriores se desarrolle con lluvia y viento. No hay que olvidar que se requiere de  una prevención de riesgos laborales específica y aplicar una serie de medidas preventivas para no poner en peligro nuestra salud laboral.

Papel de la Inspección de Trabajo

La Inspección de Trabajo tiene encomendadas la vigilancia y exigencia de cumplimiento de las normas legales que incidan en las condiciones de trabajo. Por lo tanto, están obligados a comprobar los Planes de Seguridad Vial para conocer si se ha contemplado el riesgo de accidentes de tráfico en la evaluación de riesgos. Para ello valorará los siguientes factores que actúan sobre la persona:

  • Los errores humanos en la conducción.
  • Los factores psicosociales y la capacidad de conducción.
  • La motivación en la conducción.
  • Las emociones en la conducción.
  • Fatiga y conducción.
  • Sueño y conducción.
  • La conducción bajo los efectos de las drogas, alcohol o fármacos.
  • Agresividad y conducción.
  • Estrés, ansiedad y conducción.
  • Velocidad y conducción.
  • Estresores del ambiente de tráfico.

Además, Inspección de Trabajo comprobará que las condiciones del vehículo son las adecuadas respecto de la actividad desarrollada, cuya evaluación debe contener los riesgos específicos de ésta.

Por último, verificará el cumplimiento normativo de la organización preventiva respecto de las medidas de emergencia, de coordinación de actividades empresariales, información y formación, así como la correcta investigación de los accidentes de tráfico viales.

Recuerda que es competencia de los delegados de prevención verificar que la evaluación de riesgos laborales recoge el riesgo de accidente in itinere, así como los riesgos específicos de la actividad. Si no existe un plan de seguridad deben promover su implantación con el objetivo de reducir la siniestralidad en la empresa y sus costes, humanos y materiales, asociados.