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El mes de febrero ha dado un leve respiro al desempleo, cerrando con 13.538 desempleados menos y 96.909 afiliados más a la Seguridad Social. Pero al cifra de paro sigue siendo muy elevada: 4.512.453 personas inscritas en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo.

A pesar de este descenso en el número de parados, los datos indican que el desempleo femenino ha subido en 6.319 mujeres, alcanzando una cifra total de 2.394.173 desempleadas, lo que representa el 53,1% del desempleo total en España. En este mismo sentido, el desempleo juvenil ha experimentado un incremento de 2.569 personas más, alcanzando un total de 387.501 jóvenes sin empleo. Una vez más, el desempleo vuelve a castigar con fuerza a las mujeres y jóvenes españoles, síntoma de que la recuperación del empleo no marcha por buen camino.

Durante el mes de febrero se registraron 1,2 millones de contratos, creciendo la contratación indefinida en 120.281 contratos, cifra que alcanza el 9,80% del total de todos los contratos. Sin embargo, la contratación temporal sigue suponiendo el 89% del total, una cifra aún muy elevada.

Desde la Unión Sindical Obrera (USO) apostamos por el empleo de calidad y estable, con remuneraciones adecuadas y éste no es el empleo que se está creando. El Estado debe impulsar medidas efectivas que a largo plazo consigan acabar con la hegemonía del contrato temporal frente al indefinido.

Otro elemento a tener en cuenta es el descenso continuado de la tasa de cobertura del sistema de protección por desempleo, que durante el mes de enero ha sido de 56,49%, lo que supone un 8% menos que en 2014, y de la cuantía media bruta de la prestación contributiva, que en enero fue de 815,4 euros, un 1,7% menos que en enero de 2014. Para USO, esta caída continuada en la tasa de cobertura a desempleados demuestra que el paro estructural está fortaleciéndose, lo que conlleva que un gran número de personas que llevan ya varios años sufriendo las consecuencias del paro y la crisis económica, no consigan salir de esta grave situación. Desde USO reclamamos la puesta en marcha de medidas de fomento del empleo dirigidas a parados de larga duración, de todas las edades, así como dirigidas a jóvenes, que configuren un empleo digno que afiance la salida de la crisis.