El Gobierno ha aprobado la Estrategia de Desarrollo Sostenible. USO pide que se constituya como guía vinculante para la recuperación de la crisis originada por la pandemia
El último Consejo de Ministros ha aprobado la Estrategia de Desarrollo Sostenible (EDS), un instrumento para que España cumpla con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con los se que se comprometió en 2015. Esta Estrategia se presentará al Foro Político de Alto Nivel de las Naciones Unidas el próximo mes de julio, donde se revisará el grado de cumplimiento e implicación de nuestro país con la Agenda 2030.
La Estrategia de Desarrollo Sostenible se constituye como una hoja de ruta que establece los retos que debe afrontar España para cumplir con sus objetivos así como las políticas aceleradoras que le permitirán alcanzarlos. Este documento es fruto de un proceso de trabajo en el que han participado organizaciones de la sociedad civil conformadas en la plataforma Futuro en Común, de la cual USO forma parte.
Desde USO celebramos la aprobación de esta herramienta para avanzar hacia una sociedad más justa, igualitaria y sostenible, y pedimos que se convierta en una guía vinculante para la recuperación de la crisis originada por la pandemia. Sin la recuperación de las personas, el planeta y un cambio en el modelo productivo, no habrá recuperación económica posible.
Ocho retos país y ocho políticas aceleradoras
El documento aborda varios ejes que estructuran los problemas que frenan a nuestro país en el avance hacia un desarrollo sostenible. También identifica ocho retos y ocho políticas aceleradoras que deben ser abordados de forma prioritaria:
- Reto país 1: acabar con la pobreza y la desigualdad. Política aceleradora: transición social, redistribución de la riqueza y garantizar derechos.
- Reto país 2: hacer frente a la emergencia climática y ambiental. Política aceleradora: un país que respete los límites del planeta.
- Reto país 3: cerrar la brecha de la desigualdad de género y poner fin a la discriminación. Política aceleradora: vidas libres e iguales para todas.
- Reto país 4: superar las ineficiencias de un sistema económico excesivamente concentrado y dependiente. Política aceleradora: un nuevo modelo económico y productivo verde, digital y justo.
- Reto país 5: poner fin a la precariedad laboral. Política aceleradora: calidad y estabilidad en el empleo.
- Reto país 6: revertir la crisis de los servicios públicos. Política aceleradora: servicios públicos reforzados para un Estado del Bienestar democrático y resiliente.
- Reto país 7: poner fin a la injusticia global y a las amenazas a los derechos humanos, los principios democráticos y a la sostenibilidad del planeta. Política aceleradora: liderazgo internacional para una globalización justa, sostenible, igualitaria, democrática y basada en los derechos humanos.
- Reto país 8: revitalizar nuestro medio rural y afrontar el reto demográfico. Política aceleradora: cohesión social y territorial. Un medio rural con iguales derechos y oportunidades.
En el informe se despliegan toda una serie de datos que evidencian el impacto que han sufrido los trabajadores y las capas más vulnerables de la sociedad en la última década, motivado por las políticas de austeridad fiscal y ajuste salarial. En lo que respecta a los indicadores sobre pobreza, estos muestran que España se ha convertido en un país cada vez más pobre y desigual. A esto se añaden los sucesivos recortes salariales y la creciente precarización de las condiciones sociolaborales que hacen que, hoy en día, para una parte de la población, estar integrado en el mercado laboral no sea suficiente para evitar o salir de la pobreza.
Para hacer frente a estos retos, el texto plantea toda una serie de medidas como puede ser un “programa de ayuda alimentaria a las personas más desfavorecidas” o “medidas para acabar con la pobreza energética”. Asimismo, y con las políticas aceleradoras para revertir la precariedad laboral, el texto plantea algunas medidas, reivindicadas por USO desde hace tiempo, como “la aprobación de un nuevo Estatuto del Trabajo adaptado a las condiciones del siglo XXI” y “la recuperación del papel de los convenios colectivos mediante la reforma de la estructura, el ámbito temporal y las condiciones de inaplicación de la negociación colectiva”.
Del texto a las políticas
Sin duda, la Estrategia de Desarrollo Sostenible se presenta como un documento que recoge un buen número de demandas planteadas por distintas organizaciones de la sociedad civil, incluidos los sindicatos. Las soluciones que plantea son correctas aunque en muchas ocasiones adolece de concreción en cuanto a cómo se van a desarrollar. Y esto último es la clave para asegurar que los otros dos procesos de planificación a largo plazo que está liderando el Gobierno -el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia y la Estrategia Nacional de Largo Plazo #España2050- vayan en sintonía con el cumplimiento de esta Estrategia de Desarrollo Sostenible.
En estos momentos en los que desde el Gobierno se está esbozando el tipo de recuperación y economía que configurará nuestro país, es imprescindible que las medidas destinadas a acercar los indicadores de bienestar social y desarrollo sostenible a los de los países de nuestro entorno se materialicen en la realidad de la población. Desde USO esperamos que esta Estrategia de Desarrollo Sostenible no se configure como un trámite a presentar frente a las instituciones de la ONU y que realmente podamos apreciar los beneficios de su puesta en marcha cuanto antes.
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