Multitudinaria manifestación de los trabajadores de Nissan frente al Congreso para exigir soluciones contra el cierre de las plantas y los despidos
Más de 2.000 trabajadores de Nissan, reforzados por compañeros de USO y otros sindicatos en Madrid, han marchado desde la glorieta de Carlos V hasta el Congreso de los Diputados. Allí, a gritos de “Nissan no se cierra”, “Futuro para Nissan ya” y otras consignas, le han querido recordar al Gobierno y a los grupos parlamentarios que deben implicarse para garantizar los empleos de 2.525 trabajadores directos en los centros de trabajo de Barcelona. En total, más de 25.000 puestos en peligro.
Los manifestantes llegaron en autobuses y coches desde Barcelona, cumpliendo estrictamente las medidas de seguridad frente al covid-19 para evitar contagios. La petición de partida a los diputados era clara: “deben tomar ya cartas en el asunto. La primera medida urgente, tal y como le pedimos por escrito al Ministerio de Trabajo, es derogar el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores. Esto le permitiría a la Autoridad Laboral recuperar las competencias para la tramitación administrativa de los despidos colectivos en casos tan injustificados como el que ha planteado Nissan”, expone Raúl Montoya, secretario de Acción Sindical de la Federación de Industria de USO.
Derogar al artículo 51 del Estatuto, la consigna trasladada a los responsables de Industria en el Congreso
“Se acabó el tiempo de las buenas palabras, es tiempo de legislar para los trabajadores y la ciudadanía”, le han afeado los trabajadores de Nissan a los responsables de Industria de los grupos parlamentarios en la reunión posterior a la manifestación.
“Todos nos dicen que sí, que tenemos razón, que están con nosotros… basta ya de buenas palabras de quien tiene en su mano la posibilidad de revertir la situación. Hemos sido claros con los diputados: hay que derogar ya el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores y que la Autoridad Laboral recupere las competencias que le robó la Reforma Laboral de 2012. No estaríamos hablando de un ERE como este con la legislación anterior”, resume Miguel Ruiz, secretario general de Sigen-USOC, sindicato mayoritario en las plantas de Nissan de Barcelona.
Con voluntad del Congreso, puede revertirse la situación de Nissan
Los representantes sindicales coinciden en que “si hay voluntad, puede hacerse. Y si alguien va a votar en contra, que se descare. Esta votación tiene que ir urgentemente al Congreso, como se hizo con el artículo 52.d. Les hemos recordado que desde USO ya le hicimos llegar al presidente del Gobierno esta petición a través de Reyes Maroto, y que volveremos a hacerlo tantas veces como sea necesario”, recalca Ruiz.
Los trabajadores de Nissan tienen muy claro que “debería blindarse que una empresa que ha recibido ayudas públicas o que se ha acogido a un ERTE subvencionado con dinero del Estado no puede plantear un cierre y un ERE total sin la autorización del Gobierno, a través en este caso de la Autoridad Laboral”, explica el delegado de Sigen-USOC.
Los trabajadores de Nissan están volviendo ahora a Barcelona tras la exitosa manifestación a las puertas del Congreso que pide a los poderes públicos que no se pongan de perfil en decisiones que están en su mano. “Nosotros vamos a seguir dando la batalla por nuestros empleos, pero dejar morir a la industria en su conjunto depende de ellos. Para Nissan la necesidad de derogar el 51 es inmediata, pero se evitarán otros muchos despidos colectivos a corto y medio plazo”, concluye Miguel Ruiz.
Sin acuerdo en las mediaciones de Treball, donde Nissan pretende que corra el período de consultas
Mientras tanto, prosiguen otros frentes abiertos. Raúl Montoya, miembro también de la Mesa de Mediación promovida desde el Departament de Treball de Cataluña, resalta de la reunión de ayer que “quedó demostrado que Nissan miente en las causas que alega y pretende un ERE ilegal. La empresa presenta en su memoria un ERE por causas organizativas y productivas y, sin embargo, en las reuniones explica unas causas económicas tácitas. A esto se añade que el inicio del período de consultas que pretenden dar por bueno se inició antes de que terminara el proceso en el comité europeo, otra irregularidad. Y que las consultas empiezan viciadas porque Nissan ha manifestado que ya ha decidido cerrar, no buscar alternativas productivas”.
Por eso, resalta FI-USO, central mayoritaria en Nissan-Barcelona, “le pedimos que, para negociar, en Treball o donde quieran, deben retirar el ERE, que condiciona las conversaciones, y esperar a que el comité europeo se pronuncie”. La próxima reunión está fijada para el día 21.
Toda la USO, por la industria y con la plantilla de Nissan
El secretario general de USO, Joaquín Pérez, ha acompañado a los trabajadores de Nissan frente al Congreso: “la falta de política industrial durante tantas legislaturas ha abocado a conflictos como este. Urge resolver el de Nissan, pero en el marco de unas medidas industriales globales. Con respecto a este cierre, es inaceptable que Nissan haya aprovechado este momento para anunciarlo. Es una empresa que ha recibido muchas ayudas para su actividad, y esperamos que, de irse, se le haga devolver cada euro”.
Los trabajadores de Nissan han vuelto a contar fuera de Barcelona con el respaldo de toda la USO. Tal y como ya ocurrió en Cantabria, tanto la Confederación como USO-Madrid se han volcado en recibir y secundar las movilizaciones de la plantilla.
“Desde USO-Madrid, queremos apoyar con nuestra presencia la movilización que hoy han traído a nuestra ciudad los compañeros de Barcelona. Hay que defender los puestos de trabajo y la industria sea donde sea, y aquí tienen a la USO de Madrid para sumar voces a su protesta. No se está cumpliendo la consigna de no dejar a nadie atrás, y es lo que hoy hemos venido a decirles a nuestros representantes políticos”, apoya Conchi Iniesta, secretaria general de USO-Madrid.
Los trabajadores de Ferrovial, también en lucha por sus empleos, han acudido a apoyar la reivindicación de Nissan en el mismo lugar en el que ellos han pedido hace apenas unas semanas que se dé una solución al servicio a bordo de Renfe.
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