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El Gobierno aprueba hoy un Real Decreto para subir las pensiones contributivas y no contributivas un 0,25%, a partir del 1 de enero de 2017, incremento mínimo establecido por ley. Será así el cuarto año consecutivo en el que las pensiones suben en esta cuantía.

Desde la Unión Sindical Obrera denunciamos que, de esta forma, los más de 8,5 millones de pensionistas perderán un 1,75% de poder adquisitivo en 2017, ante las previsiones del Banco de España que ha elevado al 2% la inflación para 2017. “Sigue tratándose de un incremento insuficiente que continuará incidiendo en el empobrecimiento de los pensionistas. Además, teniendo en cuenta que más de 2 millones de pensionistas, 23% del total –la mayoría mujeres-, cobran pensiones entre los 600-650 euros, este incremento será casi imperceptible”, apunta Joaquín Pérez, secretario general de USO.

“El Gobierno tiene la obligación de preservar por Ley la garantía del mantenimiento real del poder adquisitivo de los pensionistas así como dignificar las pensiones mínimas equiparándolas al Salario Mínimo Interprofesional”, explica Pérez.

No podemos obviar el preocupante déficit por el que viene atravesando la Seguridad Social, que viene aumentando desde 2010, como consecuencia de la pérdida de puestos de trabajo y por tanto de cotizantes al sistema, así como, la devaluación de las cotizaciones que se realizan como consecuencia de los menores salarios y las menores jornadas. Todo ello, unido a la tendencia demográfica de envejecimiento de la población y al descenso de la natalidad, augura un futuro incierto para el sostenimiento del sistema de pensiones.

“Desde el pensionazo del 2011, con el beneplácito de CCOO y UGT, no se ha hecho más que cuestionar el sistema público de protección social, predicando una insostenibilidad matemática más que buscando alternativas y soluciones a medio y largo plazo. Desde USO reclamamos que se aborde cuanto antes este urgente desafío político”, añade el Secretario de Comunicación y Formación de USO.

Por ello, desde USO exigimos al Gobierno que no olvide que el principal problema de nuestro país es el desempleo y es a remediarlo a lo que debe dedicar todos sus esfuerzos, apostando por el empleo de calidad, por el desarrollo del capital humano a través de una mayor inversión en educación y formación, por potenciar la investigación, el desarrollo y la innovación y por impulsar medidas de estímulo del mercado laboral que genere trabajos estables con salarios justos y un sistema de incentivos para aumentar el índice de empleo juvenil.