A lo largo de esta semana, se da el grueso de la vuelta al cole, en la que quedan de lado los problemas laborales más urgentes, que afectan a la calidad de la enseñanza

La vuelta al cole se da de forma escalonada en toda España a lo largo de esta semana, en función de etapas educativas y territorios. Muy poquitos son los alumnos que ya regresaron a las aulas el pasado viernes o que lo harán el próximo lunes.

Esta vuelta al cole, en el ámbito familiar, viene marcada por una notable alza de precios. Así, según diversos estudios y comparadores de precios, el coste medio de la vuelta al cole ronda los 500 euros, con un alza sobre 2023 de más de 40 euros, que se suma a la subida de cerca de 70 euros que ya sufrieron los alumnos en 2022. Es decir, en dos años la vuelta al cole se ha encarecido en más de 100 euros de media. Los libros de texto en papel, con ayudas muy desiguales entre las comunidades autónomas, se llevan el grueso del gasto, con unos 340 euros por estudiante.

Son solo algunas cifras. En otros informes, podemos leer que el incremento del material escolar es del 15 % y en los uniformes, del 10 %. Son cuestiones de gran impacto para las familias, pero que, cada inicio de curso, opacan otras cuestiones educativas que son, a juicio de la Federación de Enseñanza de USO, urgentes de acometer. Con una única finalidad: dar un impulso serio y objetivo a la calidad de la educación de nuestro país.

Nuevo curso para todo el personal docente y no docente

Porque, al otro lado de esa vuelta al cole mediática, de precios y subida, está el profesorado y, en general, todo el personal, tanto docente como no docente. La Federación de Enseñanza de USO desea a todos los trabajadores un buen curso escolar que, además, permita avanzar de manera significativa en la mejora de sus condiciones laborales y profesionales, ancladas durante años.

En FEUSO pensamos que es el momento oportuno para trabajar, todos unidos, por la mejora de la calidad. Ese es, en opinión de USO, el gran reto de la educación de nuestro país. En este nuevo curso escolar, FEUSO seguirá ofreciendo a todos sus afiliados, delegados y simpatizantes la necesaria atención sindical para ayudarlos en la gestión de sus problemas laborales.

Quienes conforman la Federación de Enseñanza de USO destacan que somos, ante todo, un sindicato de proximidad. Que estamos junto a los trabajadores de la enseñanza con el fin de facilitarles su importante tarea, aportando en todos los foros y mesas de negociación nuestras reivindicaciones y dinamizando la actividad sindical junto a los comités de empresa y los delegados de personal.

Los docentes, la clave de la educación

Para mejorar la educación, es imprescindible mejorar a su vez la atención personalizada de todos los alumnos. Y esto debe hacerse independientemente del centro donde cursen sus estudios (ya sea este público, concertado o privado).

La crisis demográfica que estamos padeciendo, de manera llamativa en las primeras etapas de nuestro sistema educativo, nos facilita reflexionar sobre el modelo educativo que queremos y las medidas que somos capaces de tomar. Es el momento de devolver la educación a su papel prioritario.

Y en FEUSO estamos convencidos de que no es posible sin docentes bien preparados, motivados y centrados en el esfuerzo principal, que es la relación educativa profesor-alumno.

Estamos ante una oportunidad histórica para avanzar en esta dirección, convirtiendo al profesorado en el motor de cualquier cambio o renovación. Debe valorarse la tarea educativa que realiza el profesorado, el esfuerzo que supone el trabajo en las aulas y su preparación, además de hacer frente a demasiadas tareas burocráticas y a otras dificultades propias de la convivencia en los centros. Siempre teniendo en cuenta que se trata con menores.

Reformas valientes que mejoren sus condiciones laborales

USO apuesta por abordar inmediatamente las condiciones salariales para que la profesión docente sea mucho más atractiva y no ocurra, como ya está sucediendo, que muchos profesionales prefieran optar por otros trabajos mejor remunerados y con más proyección de futuro.

Sin ir más lejos, queda patente la escasez de profesores de matemáticas, informática, física y otras disciplinas científicas, tanto en la ESO como en Bachillerato y Formación Profesional. No es tanto un problema de vocaciones, como de que otras salidas profesionales les resultan mucho más atractivas que la docencia.

Pero las medidas que deben tomarse no son solo salariales. En su relación con todo tipo de centros educativos, públicos, privados y concertados, FEUSO aprecia que las preocupaciones más repetidas por los trabajadores de la enseñanza se refieren a la necesidad de introducir reformas legislativas más valientes para:

  • rebajar las ratios alumno aula.
  • reducir horas lectivas, tomando como referencia las adoptadas en la escuela pública.
  • disminuir la jornada de los mayores de 55 años.
  • potenciar la jubilación anticipada, con el fin de rejuvenecer las plantillas de los centros educativos.

En cuanto a estas medidas, poco o nada se está haciendo. Sobre todo, en los centros privados y concertados, con jornadas laborales en muchos casos incompatibles con la calidad que dicen ofertar.

La negociación colectiva, paralizada

FEUSO alerta de la poca sensibilidad con estos temas que se encuentra en las mesas de negociación con las Administraciones educativas y las empresas. Sin embargo, para la Federación de Enseñanza de USO son básicas para avanzar en la calidad de la educación en general. Por ejemplo en la escuela pública, necesitada de más inversiones en medios humanos y materiales para cumplir con sus objetivos educativos y atender las reivindicaciones de su profesorado.

Pero lo estamos viendo también, de manera muy preocupante, en la deriva sin rumbo del Convenio de Educación Infantil. Este convenio está atascado desde hace años, con muchos de sus centros en situación precaria. La parálisis repercute especialmente en las condiciones laborales y económicas para las trabajadoras del sector, la gran mayoría mujeres.

Nos preocupa también el estancamiento de las negociaciones del Convenio de Atención a la Discapacidad. En ellas, los integrantes de la Mesa de Negociación no consiguen arbitrar medidas que repercutan positivamente en las condiciones laborales de unos trabajadores que necesitan medidas para mejorar su prestigio y la calidad de su trabajo.

Preocupaciones parecidas enfrentamos en el Convenio de Enseñanza Privada, firmado recientemente. En este sector, es necesario establecer un marco laboral estable para los profesores de Formación Profesional, muy preocupados por que la implantación de la nueva Ley de Formación Profesional no repercuta negativamente en sus condiciones laborales.

Y FEUSO seguirá también trabajando en la negociación de los convenios que afectan a los trabajadores de las universidades privadas, buscando las mejores soluciones laborales y profesionales para el futuro de este sector, cada vez más pujante.

Otras negociaciones laborales pendientes

FEUSO muestra también su insatisfacción por los problemas laborales que está ocasionando la implantación de la nueva configuración de la asignatura de Religión. Esto ha provocado que muchos profesores y profesoras vean reducidas drásticamente sus jornadas (y sus salarios) o vayan directamente al paro.

Desde FEUSO, seguiremos trabajando para prestigiar su importante labor docente y para que la asignatura de Religión tenga la misma consideración que el resto de las asignaturas en el currículo escolar.

Y, en relación con la Enseñanza Concertada, creemos urgente resolver el problema de las Tablas Salariales de 2023 y 2024 en pago delegado para normalizar los plazos establecidos en el VII Convenio colectivo. Hay que recuperar la homologación salarial de los bachilleratos, que han perdido un 1 % desde 2023, sin ninguna respuesta patronal hasta el momento y solucionar definitivamente el problema originado por los últimos incrementos anuales del SMI en el PAS, que está igualando salarios en la mayor parte de sus categorías profesionales y afectando a sus complementos por antigüedad, también sin ninguna propuesta patronal.

El cumplimiento del control y registro horario establecido en el Anexo I del convenio merece una mención aparte. Lamentablemente, no existe en su aplicación la misma unanimidad que hubo en su firma por parte de las organizaciones sindicales y patronales, por ejemplo, en el establecimiento de los cuadros horarios de los trabajadores cada curso escolar teniendo en cuenta los calendarios laborales y con la participación de sus representantes legales.

Desde FEUSO, deseamos que se materialicen las negociaciones con el Ministerio de Educación para que, de una vez por todas, se haga en nuestro país un estudio serio y oficial sobre el coste del puesto escolar. Es sin duda un estudio necesario para poder actualizar todas las partidas destinadas a los conciertos educativos, claramente deficitarias desde hace décadas para trabajadores, centros y familias, como siempre han reconocido las propias Administraciones, que han preferido dejar el tiempo correr.

Abordar con profesionalidad los problemas de salud mental

Otro asunto sobre el que FEUSO llama la atención en este comienzo de curso es la preocupante generalización de altos niveles de estrés en los centros educativos.

Estos problemas están afectando seriamente a la salud mental de los docentes y del resto de la comunidad educativa. En nuestras periódicas visitas a los centros, vemos cómo los trabajadores reclaman ayuda especializada en estas cuestiones, sobre las que apreciamos, además, una cierta alarma social.

FEUSO cuenta con un Gabinete de Salud Mental para fomentar la prevención de los problemas psicológicos, tan extendidos en la comunidad educativa a todos los niveles.

Para concluir, queremos destacar un aspecto muy positivo de la educación española en los últimos años: el impulso que ha tomado la Formación Profesional. Pero con una salvedad: esperemos que las medidas aprobadas para su implantación en el próximo curso no repercutan negativamente en las condiciones laborales del profesorado. En FEUSO estaremos atentos para que no cambien estas condiciones en los convenios colectivos que puedan verse afectados.